Tratar de hacer comprender algo que se ve que es lógico a cien kilómetros pero otra persona no lo ve no siempre es sencillo. En mi caso he decidido y me he dado cuenta por fin que antes de intentar abrir los ojos a nadie lo mejor es que ese alguien se estrelle y vea la realidad por sí mismo, por muy grande que sea el golpe es lo mejor y lo más sencillo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario